Fue el primer gran compositor de lied (breve composición para voz y piano, antecesora de la moderna canción; uno de los géneros del Romanticismo), un modelo que seguirían los músicos posteriores, componiendo así mismo música para piano, de cámara y orquestal.
Aprendió muy temprano a tocar el violín y el piano y, a los once años, fue admitido en la Capilla Imperial como miembro del Coro de los Niños Cantores de Viena y como alumno del Internado Imperial (Stadtkonvikt), donde tuvo como maestro a Antonio Salieri. Precisamente fue la orquesta de discípulos del Stadtkonvikt, de la que él mismo era violinista, quien interpretó sus primeras piezas. En 1813 deja este centro y empieza a trabajar en la escuela de música de su padre, mientras crea sus primeras obras maestras, como el lied El rey de los elfos, inspirado en un poema de Goethe. Después abandonaría la escuela paterna y Schubert intentaría ganarse la vida únicamente con su música.
Fue uno de los grandes compositores de música religiosa aunque no pudo destacar en la ópera. Pero sí lo hizo en el lied, componiendo, entre 1815 y 1816, más de 150 lieder de excelente calidad.
A pesar del éxito que obtuvo con estas composiciones, Schubert vivió siempre en precariedad económica, la cual se agravó a partir de 1824 con los primeros síntomas de la enfermedad que acabaría prematuramente con su vida. Sería después de su fallecimiento cuando comenzaría a ser más reconocido.
Franz Peter Schubert
(Himmelpfortgrund-Viena, 1797 – Viena, 1828), compositor austriaco continuador del Romanticismo iniciado por Beethoven.