Guía de Viena

Dinastías

Seguramente habrán escuchado hablar de las dos dinastías que han marcado y formado la historia de Austria y de Viena: la dinastía Babenberg y la dinastía Habsburgo.

Dinastía Babenberg:

Dinastía de margraves y duques de origen alemán que gobernó la región de Austria desde el año 976 (considerado el año de la fundación de Austria) con Leopoldo I, quien conquistó a los húngaros la región de Viena, hasta el año 1248, con Federico II el Batallador.
Fueron aumentando y afianzando su poder gracias a los casamientos y a las batallas ganadas. En varias ocasiones sufrieron los ataques de los húngaros, lo que provocó, entre otras cosas, que se fortificara la ciudad en 1137.
También durante el gobierno de los Babenberg es el momento en el que se construyen importantes edificios como, por ejemplo, la Catedral de San Esteban (consagrada en 1237).
El escudo de los Babenberg, con franjas horizontales roja-blanca-roja, tiene su origen en una leyenda, según la cual, cuando el conde Leopoldo V regresó de la Tercera Cruzada a finales del s. XII, su manto blanco venía ensangrentado, teñido así de color rojo, excepto bajo su ancho cinturón; desde entonces los Babenberg adoptaron esos colores, y en ese orden, para su escudo, el cual ha dado lugar a la bandera de Austria, que se utiliza desde el siglo XII.

Dinastía Habsburgo:

Dinastía de duques (1282-1453), archiduques (1453-1804) y emperadores (1804-1918) que gobernó el país durante casi 650 años, desde 1278, con Rodolfo I, hasta la proclamación de la República, tras la I Guerra Mundial, en el año 1918. Etimológicamente, el nombre de Habsburgo proviene de su castillo de Habichtsburg (castillo del azor) en Suiza, construido en el s.XI, momento en el que sus dominios se extendían por el norte de Suiza y Alsacia. Durante los más de seis siglos que se mantuvieron en el poder, llegaron a tener el título de emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico (desde 1452 hasta la caída del gran Imperio en 1806), se expandieron enormemente geográficamente hablando, llegando a dominar incluso España, lucharon con húngaros y turcos entre otros, otorgaron a Viena el título de ciudad, impulsaron las artes y la cultura, y reorganizaron urbanísticamente la ciudad, dotándola de muchos de los majestuosos edificios e instituciones religiosas que podemos contemplar hoy en día.

Algunos personajes destacados de la dinastía Habsburgo: