El Barbero de Sevilla (Il Barbiere di Siviglia), de Gioacchino Rossini, es una ópera bufa en dos actos, con libreto de Cesare Sterbini Romano, basado en la obra teatral Le Barbier de Séville (1775), de Pierre Augustin Caron de Beaumarchais (en la cual también se basaron otras obras musicales compuestas por Giovanni Paisiello e Isouard, así como Las Bodas de Fígaro de Mozart). El Barbero de Sevila se tituló inicialmente Almaviva ossia l'Inutile Precauzione (Almaviva o la Inútil Precaución) para evitar la coincidencia con la ópera Il Barbiere di Siviglia de Giovanni Paisiello.
Rossini escribió esta ópera en un tiempo récord, ya que el contrato de la ópera se firmó menos de dos meses antes de su estreno. Muchos años después, Rossini alegaba que la terminó en sólo trece días, aunque es muy probable que el tema de Fígaro lo tuviera en mente desde mucho antes de componerlo.
El Barbero de Sevilla de Rossini fue estrenada el 20 de febrero de 1816 en el Teatro Argentina de Roma, bajo la dirección del propio Rossini. La noche del estreno fue un rotundo fracaso, en parte debido a los continuos abucheos de los partidarios de Paisiello. Pero la segunda representación fue un triunfo. La obertura original no gustó y Rossini tuvo que sustituirla por la que ya había utilizado en sus óperas Aureliano in Palmira (1813) y Elisabetta, Regina d'Inghilterra (1815), aunque ha quedado ligada a El Barbero de Sevilla. Esta obertura, interpretada frecuentemente como pieza de concierto, tiene un carácter alegre, gracioso y humorístico que prepara al público para el ambiente en el que se desarrolla el resto de la ópera.
La acción transcurre en Sevilla a finales del s.XVIII, escenario magníficamente escogido por Beaumarchais para el desarrollo del tema tratado.